Introducción
Inspirada en las frescas aguas de Dakota del Sur, esta receta de salmón a la parrilla con mantequilla de eneldo se centra en sabores puros y una presentación espectacular. Con la parrilla Arteflame, sellamos el salmón para conservar su sabor y lo terminamos delicadamente en la superficie plana. Tanto si eres un asador de fin de semana como un chef casero, esta receta te da todas las herramientas para preparar salmón como un profesional.
Ingredientes
- 4 filetes de salmón recién pescado (con piel, de aproximadamente 6 oz cada uno)
- 3 cucharadas de mantequilla salada
- 2 cucharadas de eneldo fresco picado
- 1 limón cortado en gajos
- 1 cucharadita de sal marina
- 1/2 cucharadita de pimienta negra fresca
- 2 dientes de ajo picados
- Aceite vegetal (para encender la parrilla)
- 3 servilletas de papel (para encender la parrilla)
- Leña
Instrucciones
Paso 1: Encienda la parrilla Arteflame
- Vierta aceite vegetal en 3 servilletas de papel.
- Coloque las servilletas en el centro de la parrilla Arteflame.
- Apila leña sobre las servilletas.
- Enciende las servilletas y deja que la parrilla se caliente durante unos 20 minutos hasta que la rejilla central alcance más de 1000 °F y la superficie plana de la cocción esté caliente.
Paso 2: Preparar la mantequilla de eneldo
- Mientras se calienta la parrilla, derrita la mantequilla en un recipiente pequeño sobre la superficie plana.
- Incorpore el eneldo picado, el ajo picado, la sal y la pimienta.
- Déjelo a un lado, manteniéndolo caliente cerca del borde exterior de la plancha.
Paso 3: Sellar el salmón
- Sazona ligeramente ambos lados de los filetes de salmón con sal y pimienta.
- Coloque los filetes con la piel hacia abajo sobre la rejilla central de la parrilla (a más de 1000 °F) para dorarlos durante 1 minuto y conservar los jugos.
- Voltee y dore la parte de la pulpa durante 1 minuto.
Paso 4: Sellado inverso en la parte superior plana
- Pasar los filetes sellados a la plancha plana.
- Elija una zona de calor medio más cercana al centro para cocinar por completo.
- Coloque con una cuchara mantequilla de eneldo sobre cada filete y déjelos cocinar suavemente durante otros 5 a 8 minutos o hasta que la temperatura interna alcance 130 °F (deténgase a 115 °F para permitir la cocción continua).
Paso 5: Toque final
- Retire el salmón y déjelo reposar 5 minutos antes de servir.
- Sirva con gajos de limón para un final brillante.
Consejos
- Utilice un termómetro digital para retirar el salmón a 115 °F; subirá a 130 °F mientras reposa.
- Mantenga la mantequilla de eneldo derretida caliente en la parte exterior de la superficie plana de la cocina, lejos del centro donde hay calor intenso.
- No sobrecargue la superficie plana: deje espacio para que el salmón se dore correctamente.
- Ase siempre a la parrilla con la piel para proteger la delicada carne y conseguir una piel crujiente.
- Asar a la parrilla con mantequilla realza el sabor y da un hermoso acabado dorado.
Variaciones
- Salmón con hierbas cítricas:Reemplace el eneldo con una mezcla de ralladura de naranja, ralladura de limón y tomillo para obtener un sabor cítrico brillante.
- Salmón cajún picante:Frote los filetes con condimento cajún y use mantequilla especiada en lugar de mantequilla de eneldo.
- Salmón al ajillo y romero:Reemplace el eneldo por romero fresco y agregue ajo adicional para obtener un sabor terroso y audaz.
- Salmón glaseado con arce:Mezcle el jarabe de arce con mantequilla y una pizca de cayena para obtener un glaseado dulce y picante.
- Salmón con mostaza y miel:Prepare un glaseado con mostaza de Dijon, miel y un poco de eneldo para darle un toque picante.
Las mejores combinaciones
- Espárragos o calabacines a la plancha
- Papas baby planas cocidas con mantequilla de romero
- Ensalada de rúcula con vinagreta de limón
- Chardonnay o Sauvignon Blanc cítrico
- Tostada de masa madre a la parrilla con un toque de mantequilla de ajo
Conclusión
El salmón a la parrilla estilo Dakota del Sur con mantequilla de eneldo lleva la frescura del aire libre directamente a tu plato. Con la parrilla Arteflame, podrás sellar el salmón a la perfección y terminarlo con delicadeza, todo en un solo espacio y sin complicaciones de limpieza. Simple, elegante y con una cocción perfecta, siempre.