INGREDIENTES
PREPARACIÓN
Esto va a tomar algún tiempo para que salga bien...
Cortar el bacalao en trozos y colocarlos en una cacerola con agua. Dejar reposar en el agua durante 2 o 3 días en el frigorífico, cambiando el agua dos veces al día.
Después de remojar el bacalao, cambiamos nuevamente el agua y colocamos el bacalao en el agua fresca en una sartén y añadimos las hojas de laurel. Cocine el bacalao durante 30 minutos en una sección de la parrilla a fuego lento, retirando la espuma que suba a la superficie. Esto ablandará el bacalao. Pasados 30 minutos, retiramos el bacalao de la cazuela y lo ponemos en un colador de malla con asa. Lo ponemos al fuego en el centro y lo dejamos allí 10 minutos. Sacar el bacalao de la cesta y volver a colocarlo en la sartén. Añadir 2 dientes de ajo y una pizca de sal ahumada a la sartén y mezclar bien. Cogemos una cuchara de madera (o una batidora de mano) y empezamos a mezclar enérgicamente, añadiendo poco a poco el aceite de oliva. *La cantidad de aceite dependerá del propio bacalao. Continúe mezclando hasta que el bacalao adquiera una textura untable.
Sirva sobre rebanadas de pan recién cortado o rodajas de polenta a la parrilla. Espolvorear con un poco de pimienta negra molida por encima.
