Salsa de béarnaise clásica para filetes a la parrilla y costillas

Introducción

salsa bearnesa Es una salsa francesa rica y cremosa, hecha con yemas de huevo, mantequilla, vinagre de vino blanco y hierbas. Es el acompañamiento perfecto para carnes a la parrilla, como filetes o costillas, ya que su sabor ácido e infusionado con hierbas realza la riqueza de la carne. Con la técnica adecuada, puedes preparar esta exquisita salsa para realzar cualquier plato a la parrilla.

Ingredientes:

• 1/4 taza de vinagre de vino blanco
• 1/4 taza de vino blanco seco
• 2 cucharadas de chalotas picadas
• 2 cucharadas de estragón fresco, picado (dividido)
• 1 cucharada de perifollo o perejil fresco (opcional)
• 3 yemas de huevo grandes
• 1/2 taza de mantequilla sin sal, derretida y tibia
• Sal y pimienta negra recién molida al gusto.
• 1 cucharadita de jugo de limón (opcional, para darle más sabor)

Instrucciones

1. Preparar la reducción

En una cacerola pequeña, combine el vinagre de vino blanco, el vino blanco, las chalotas picadas y la mitad del estragón fresco. Caliente la mezcla a fuego medio y cocine hasta que se reduzca a la mitad (unos 5-7 minutos). Retire del fuego, cuele la mezcla y déjela enfriar un poco.

2. Prepare una caldera doble

Llene una cacerola mediana con 2,5-5 cm de agua y llévela a fuego lento. Coloque un recipiente resistente al calor sobre la cacerola, asegurándose de que el fondo no toque el agua (para crear un baño maría). Este calor suave evita que los huevos se revuelvan.

3. Batir las yemas de huevo

En un recipiente resistente al calor, bata las yemas de huevo hasta que espesen. Añada lentamente la reducción de vinagre fría a las yemas, batiendo constantemente. La mezcla debe adquirir una consistencia cremosa y un color ligeramente pálido.

4. Añade la mantequilla lentamente

Una vez que la mezcla de yema de huevo y vinagre haya espesado, comience a agregar la mantequilla derretida en un chorro lento y constante, batiendo constantemente. Esto emulsionará la salsa, dándole una textura suave y cremosa. Continúe batiendo hasta que toda la mantequilla se haya incorporado y la salsa espese.

5. Agregue hierbas y condimentos

Retire el recipiente del fuego y añada el resto del estragón fresco y el perifollo o perejil, si lo usa. Sazone con sal, pimienta y un chorrito de jugo de limón (opcional) para darle un toque más brillante.

6. Servir inmediatamente

La salsa bearnesa se disfruta mejor caliente, así que es perfecta para prepararla justo antes de servir las carnes a la parrilla. Vierta la salsa sobre filetes, costillas a la parrilla o cualquier otro plato que necesite un toque rico y ácido.

Consejos para una salsa bearnesa perfecta

• Mantenga el fuego bajoAl batir las yemas, asegúrese de no sobrecalentarlas, ya que esto puede hacer que se revuelvan. El método de baño maría garantiza un calentamiento suave.
• Batir constantemente:Esto ayuda a que la salsa se emulsione suavemente sin separarse.
• AdelántateLa salsa bearnesa se puede preparar con antelación y recalentar suavemente a fuego lento o al baño maría antes de servir.

Variaciones

1. Limón bearnesa:Agregue más jugo de limón para obtener una versión más picante de la salsa.
2. Cebollino bearnesa:Sustituya el estragón por cebollino para obtener un sabor más suave a cebolla.
3. Béarnaise picante:Agregue una pizca de pimienta de cayena para darle un toque picante sutil.
4. Bearnesa con ajo asado:Incorpore ajo asado a la salsa para obtener un sabor más rico.
5. Trufa bearnesa:Agregue un chorrito de aceite de trufa a la salsa terminada para darle un toque lujoso.

Mejores maridajes

• Filetes a la parrilla (ribeye, filet mignon)
• Costilla de primera
• Pollo a la parrilla
• Espárragos o verduras a la parrilla

Conclusión

Esta clásica salsa bearnesa es un complemento delicioso y elegante para carnes a la parrilla, aportando un sabor ácido y herbáceo a platos contundentes como filetes o costillas. Su textura suave y mantecosa realza los sabores naturales de la carne, convirtiéndola en una opción perfecta para cualquier ocasión especial.